Bajo el título de «Tut-Ankh-Amón. Imágenes del descubrimiento de un tesoro bajo el desierto egipcio «se inauguró la exposición dedicada al faraón del mismo nombre, en colaboración con la FUNDACIÓN ARQUEOLÓGICA CLOS, el GRIFFITH INSTITUT-ASHMOLEAN MUSEUM OF ART (OXFORD) y el METROPOLITAN MUSEUM OF ART (NUEVA YORK).
La exposición se basó en el diario de excavaciones del arqueólogo británico Howard Carter, quien en 1922 sacó a la luz la tumba del faraón Tut-Ankh-Amón en el Valle de los Reyes, fue Lord Carnavon quien financió durante años la misión arqueológica, y el fotógrafo Harry Burton a quien la suerte le ofreció la posibilidad de fotografiar unos momentos de incalculable valor histórico.
Además de las instantáneas, la exhibición mostraba piezas de gran valor arqueológico así como didácticas proyecciones sobre el Antiguo Egipto y el descubrimiento de la tumba.