Bajo el título de «Dos de mayo, bicentenario de la conciencia de un pueblo» se inauguró la exposición conmemorativa a los hechos ocurridos en Madrid durante el mes de mayo de 1808.
La exposición contaba con paneles explicativos que mostraban los protagonistas más destacados de los hechos, así como algunas copias de lienzos que Francisco de Goya y Lucientes pintó relacionados con la guerra y otros de pintura historicista realizados a lo largo del siglo XIX.
En las paredes había cuadros de las batallas que tanto marcaron la historia de España.
La exposición incluía también armas blancas y de fuego procedentes del MUSEO MILITAR DE MELILLA, dos medios rostros en bronce de los capitanes Daoíz y Velarde, héroes del Dos de Mayo en Madrid y un modelo de cañón calibre de 24 fundido en 1799 bajo el reinado de Carlos IV.
La exposición compartió espacio con otra de Egipto.